Archivo del Autor: Fran Pascual

Y cada amanecer bajo a la playa y comienzo a andar sobre las frías arenas…, mirando las gaviotas que vuelan tan alto, hasta que mis pasos zozobran por el cansancio, y entonces me siento bien cerca de la orilla.     Olas de mar, que rozan mis pies, rumores que rizan las arenas esparciéndose con fresca ternura; sus ojos garzos.     Brisa de mar, sueño inocente que enreda mis cabellos, entre sus brazos; sus dedos níveos.     Espuma de mar, almíbar salado que corretea para perderse entre el dorado; su sonrisa alba.     Murmullos de mar, suaves melodías que cosquillean levemente el alma de mis oídos; su … Continuar

Madre de los vientos …llévame contigo, madre de los suspiros elévame sobre el mundo. Silencio. Oscuro. Mis ojos cerrados. …Háblame de historias, …cuéntame verdades. Sobre los amores de los juncos… No mientas. Los juncos te aman… Vuélame, cúbreme, acaríciame… Y con tus labios de cirros bésame en la frente, mis dedos perdidos frágiles y humedecidos tomarán fríamente tu cintura de fragancias. Madre de los vientos, Llévame contigo, donde las nubes sean espigas donde los ocasos sean dulces, donde el rocío no sea lágrimas. ¡Oh, madre de los vientos!, Ciérrame los ojos, ciérramelos, no quiero ver, no puedo hacerlo… Madre de los vientos, Llévame lejos… ¡Tan lejos que pueda olvidarla!

Pierde, pierde siempre…, pierde el mar sus olas en orilla. Pierde el sol sus rayos en roca. Pierde el viento su cálido aliento.   Pierde, pierde mucho…, pierde el grillo su canto en silencio. Pierde la noche su oscuridad en alba. Pierde la aurora sus lágrimas en rocío.   Pierde, pierde bastante…, pierde la nube su sangre en lluvia. Pierde la semilla su germen en trigo. Pierde la madera sus llamas en cenizas.   Pierde, pierde tanto…, pierde el rio su vida en mar. Pierde el pájaro la tierra al volar. Pierde la luna su luz de azahar.     Pierde, siempre se pierde… pero pierde más, alguien que ha … Continuar

Y nuestro pasos resonaban en el mutismo nocturno de las angostas calles, …cada vez más cerca.     Y ella me estrechaba mucho más fuerte, en cada paso, nuestros pasos volaban, y el tiempo con ellos, …cada vez más cerca, ¡…estábamos tan cerca!, detener los minutos, parar el tiempo y volverlo atrás…, detener nuestros pasos, y deshacerlos uno a uno…, …cada vez más cerca, …tan cerca, y nunca nos mirábamos bajo la luz de neón, …cada vez más cerca, …tan cerca.   El silencio era espeso casi lo masticaba, …tan cerca, tan cerca, ¡…tan cerca! ella apoyaba la cabeza sobre mi hombro, y  me apretaba cogiéndome de la cintura, …cada … Continuar