En el Picurucho de Gredos. Cuando en tu pecho no puedes respirar y no es aire lo que te falta…
Y necesito aire, aire claro, aire diáfano que se enrede en mis pulmones, que me entre limpio y fresco, pues mi pecho ya no puede respirar…, un manto oscuro cubre mis ojos y tapa mis oídos, el exceso de trabajo me sobrepasa, el sueño se me escapa cada noche entre los calores estivales, no lo puedo soportar más… Mi cabeza no para de rodar y rodar, creo que necesito de la montaña otra vez, necesito de sus ríos, de sus cielos, de sus rocas, de sus calores y de sus fríos, y del dolor del cuerpo tras una larga caminata, del suspiro largo y profundo que se escapa desde lo … Continuar